¿Que pasaría si mañana te ofrecen estabilidad duradera, solaz económico, conciliación familiar-laboral plena y un ecosistema motivador y respetuoso de trabajo? Supongo que el ambiente emprendedor se reduciría a niveles históricos, lágrimas en el mar.

Para bien o para mal, la estabilidad duradera no es lógica, el solaz económico es un error de percepción, la conciliación familiar-laboral plena es un must al que llegaremos como empleados o empresarios y probablemente al mismo tiempo en este rincón del mundo y un ecosistema motivador y respetuoso de trabajo… es algo que depende -en mucho- de uno mismo. La realidad es la que creamos a nuestro alrededor. Y será Realidad en mayúsculas en tanto nuestra comunidad perciba nuestra imagen como su principal representación.

Tal vez por ello -y solo por ello- no me convencen la supremacía de las aceleradoras en un ambiente donde una gran mayoría se empuja a tomar la pastilla roja del emprendimiento y donde aquellas aceleradoras actúan mas como camellos regalando las primeras pastillas que como un mentor que guíe a través de la madriguera de conejo. De Morfeo, apenas las pintas.

¿Son necesarias las aceleradoras? Sí. ¿Son imprescindibles para un sistema emprendedor sano? Sí. ¿Vivimos un ambiente empresario o emprendedor motivador? Sí. ¿Sí? Sí, la crisis motiva al cambio. Entonces ¿cuál es el problema?

Apenas el 0,1% de los planes tiene un meta 100% definida. Los objetivos de aquellos planes carecen de métricas sólidas. Los equipos están armados por el afecto o el ego. Decir Agile o Lean se considera suficiente para disimular en una diapo. Acelerar un vehículo con problemas estructurales para ganar una carrera donde aceleraran mas aún (y harán mayor al vehículo) ¿no os parece un sinsentido?

En el fondo, subsiste en muchos la tentación de volver a tomar la pastilla azul en cuanto la pesadilla acabe. Y mientras tanto, los que sueñan despiertos deben evitar ser confundidos con aquellos. O ser tentados a ser acelerados.