« Le poids des mots, le choc des photos » «La vie est une histoire vraie»
| Paris Match

«El peso de las palabras, el golpe de las imágenes» fue el slogan de Paris Match desde 1979 hasta 2008 (cuando lo cambiaron por  «La vida es una historia real«). Hoy la recordaba viendo el sarao montado alrededor del tamaño de Instagr.am frente al de Twitter, por lo menos en participación y de acuerdo a un informe de ComScore para Mashable, que filtraban por All Thing D. Buf.

El asunto: de momento Twitter es mas grande y quiere ser mas visual (su nueva política de contenido en la nube lo dejaba bastante claro) pero Instagr.am creció de forma imparable en los últimos 10 meses, nació como imagen, le apareció la re publicación en Twitter como un buen apéndice y hoy por hoy, gana 257 a 170  (promedio en minutos en cada aplicación). Pero creo que la cosa se puede expandir si entendemos el juego del SoLoMo con una variable implícita que sea la Visual, la imagen en la pantalla.

Visual: cuando Pantalla explica mejor que Digital tu negocio

Ayer hicimos el  hangout sobre ¿Por qué lo llaman Digital cuando quieren decir Pantallas? y creo que hemos alcanzado ese punto de contrastar posiciones que lleva una idea a un trabajo en progreso.

Decir «estoy en un negocio digital» tiene varios significados. Lo que se entienda variará entre conceptos difusos y una visión efectista basada en herramientas. Entre ambos extremos habría ideas individuales, porque de hecho son concepciones intelectuales no tangibles que dependen de la cultura personal, dando otra vuelta al índice de frikabilidad del que escribía Genís Roca.

Ésta es una reflexión de interés corporativo: surge del rechazo y de la lentitud que puede provocar la palabra digital al usarla para publicitarse en segmentos de mercado que posiblemente estén entre los mas necesitados de cambiar una cultura de empresa estancada. Pero que huyen de lo desconocido. Y Digital suele ser su palabra maldita.

Digital nos sirve a los técnicos para hablar con otros técnicos pero parece alejarnos no solo del consumidor final, sino también de especialistas y directivos de áreas de RRHH, de marketing, de comunicación, operaciones, comercial, logística y hasta produccion. Cuando la IAB muestra el enésimo estudio sobre Mobile Marketing las palabras  asociadas son teléfono, tablet, internet, mapas, gps, redes sociales, aplicaciones, codigos QR, juegos, realidad aumentada, fotos, publicidad, compras, e-commerce y por supuesto, pantallas. La palabra digital no sobresale. De cara al consumidor final, éste es impactado por el resultado, el producto, el branding. La ausencia de NFC en el nuevo iPhone es un impulso final a favor o en contra, pero no es el primer motivador de la compra de un móvil, por poner un ejemplo.

Por eso he propuesto hablar de un negocio de pantallas, ya sea que estemos en consultoría, desarrollando aplicaciones u ofreciendo servicios de generación de contenidos porque se consume, se visualizan imágenes, se leen textos en alguna clase de monitor. Los estudios de comportamiento de Pause & Effect: The Art of Interactive Narrative de Mark Meadows están basados en pantallas, no en la tecnología detras de éstas. No podemos exigirle a una empresa una coherencia digital en la gestion de las marcas o en el planning de acciones pero si podemos exigir una uniformidad en su estrategia, en su comunicación corporativa multicanal o multipantalla. Lo que nos lleva a definir socios alrededor de la pantalla (productores de contenido, editores, especialistas de comportamientos dinámicos e interactivos, estrategas de comunicación) sobre los socios alrededor de lo digital (tecnologías vinculadas, procesos en la nube, soporte y gestión de incidencias).

Puede que estos socios alrededor de la pantalla fueran los que buscó Facebook al comprar a Instagr.am a pesar de que muchos decían que no entendía el juego digital.

El hangout fue el primero sobre este tema pero no será el último que haga o en el que participe ya que el debate social hace que la idea sea pública (y por eso agradezco las participaciones de Yolanda Capdevila, Carme Vivancos, Javier Sanchez-Marco y de Nicolas Ockier y la posterior reflexión de Carlos Bages sobre el comportamiento social frente a pantallas urbanas apagadas, mal contextualizadas o con imagenes a destiempo. Merecerá otro post! 🙂